Descripción
La vida nos enseña, pero a veces no nos deja ver lo positivo que debemos aprender. Ella insiste hasta que nos rendimos a su bien.
Cuando yo no comprendía nada por mi niñez, un día, me lancé a escribir a la vida, al amor, a las flores, al cielo azul, al sol, que todos disfrutamos, y entendí que tenemos que aprender y agradecer.
En este poemario de mi vida encontrarás todos los sentimientos y sensaciones para corazones abiertos a la realidad del pensamiento y que hay que dejar florecer. Lograrás comprender, alimentar al espíritu y a la concordia, con nuestra forma de ser, comprometida a ilustrarnos por diversos caminos del papel.